Hoy estamos de vuelta de la Romería de El Rocío. Una romería marcada por los peregrinos que, cada uno a su manera y con 3 años de espera, han sabido mantener intactas las ilusiones de siempre.
Termina un camino de muchos días. Un camino lleno de alegrías y recuerdos que nos acompañarán por siempre en la memoria. Un camino que hemos compartido y disfrutado con los nuestros. Manteniendo las tradiciones de nuestros ancestros, que nos acercan a ellos y dan sentido a la tierra de la que venimos.
Los restos de polvo atrapado en el traje muestran las huellas de un camino que termina, pero que nunca acaba. Pronto volveremos a El Rocío, con la misma ilusión y esperanza del principio. Con el traje campero y el de Amazona listos para una experiencia más. Recordando a los que no se han ido y disfrutando con los que aún están por llegar.
La espera ha sido demasiado larga. Nos ha costado pero al fin hemos recuperado parte de la ansiada normalidad. Hoy algunos empiezan a limpiar sus trajes, diciéndo con pena un hasta luego. Y aunque el peregrino descanse sigue despierto. Manteniendo vivas las tradiciones de siempre. Vestido de corto o de Amazona, esperando a que llegue el momento de volver a salir y encontrarnos en el camino. Ese camino en el que muchos habéis vuelto a confiar en Tomar Artesanía para vestir con elegancia y orgullo las tradiciones más auténticas.
Hoy para nosotros no es un día de tristeza, sino de inmensa gratitud. Porque gracias a vosotros hemos vuelta a la normalidad. Ofreciendo la calidad de siempre, y el mejor servicio que podamos ofrecer. Siempre atentos a vuestras necesidades, marcando tendencia con el estilo inconfundible Tomar.
Muchas gracias a todos por confía en Tomar Artesanía y, ¡Enhorabuena por el buen camino!
El próximo año volveremos a dar rienda suelta a tu pasión.