Historia de la doma vaquera: origen y evolución
La historia de la doma de vaquera se remonta a décadas pasadas. La industria primaria era abundante en ese momento, y el trabajo agrícola era la principal fuente de empleo para muchas familias. Esta tarea requería de caballos y jinetes para cuidar el rebaño y separar ovejas, vacas y ganado según fuera necesario.
El ganado salvaje indómito fue el principal grupo de animales con los que trabajaban vaqueros y jinetes para dar a los caballos el ejercicio que necesitaban para controlar a los animales. Y de esta necesidad nació la disciplina doma vaquera, que tiene su origen en nuestro país. Más concretamente en las zonas de alto pastoreo y ganadería.
El papel de la mujer en la disciplina de la doma vaquera
Y aunque muchos atribuyen este mundo a los hombres, la mujer tiene un papel muy significativo en la disciplina. De hecho, existen trajes específicos para las mujeres participantes en los concursos de doma vaquera oficiales.
El traje debe ser el utilizado tradicionalmente en Andalucía para este tipo de disciplina ecuestre. El color de la ropa debe ser armonioso, principalmente con colores festivos, por ejemplo, negro, gris, marrón, blanco o rugoso. Los participantes deberán vestir camisa bomber o guayabera, campera y sombrero de ala ancha y bufanda o pañuelo negro para este evento.
Deben llevar vestidos largos tradicionales y no llevar flores ni joyas en el pelo. Sostienen una varita en su mano derecha y pueden usar un sombrero o un catite.
Las espuelas serán de mezclilla clásica y pueden ser de carretilla, azules, blancas o con correas de tuerca, hebillas o cordones. Al final, los jueces tomaron la decisión final sobre qué usarían las Jinetes y las Amazonas para cada ocasión, ya que era imposible precisar un estilo específico.
Los trajes específicos para las mujeres participantes en concursos oficiales
La vestimenta de la mujer en la doma vaquera es particularmente reconocible, porque es un conjunto de prendas que no solo brindan la comodidad necesaria que el reglamento existe, ¡Sino que además! Permite resaltar las virtudes de la silueta femenina al momento de portar éste traje.
En Tomar Artesanía llevamos más de medio siglo en contacto directo con este mundo, mimando a nuestro clientes y preocupándonos por conocer siempre su opinión, por eso, hoy queremos conocer la tuya: ¿Consideras que la elegancia y la tradición pueden estar de la mano?
¡Para nosotros es un rotundo SÍ! Imagínate mezclar, la belleza con la tradición, la elegancia con la sensualidad, y ¡Claro! no podríamos hablar de esto sino fuéramos testigos directos de lo que mezcla esté combinado estilo de vestir.
La importancia de la elegancia y la tradición en la vestimenta de la doma vaquera
Pocas cosas son más elegantes que una mujer portando nuestra sofisticada “Falda Campera”, con una suave caída justo en el borde de la cintura, confeccionada con cinturilla simple, con botón y cremallera lateral para ajuste. Con pliegue trasero a media altura y cierre de botones para facilitar la marcha. O por mencionar otra prenda, un ceñido y recio “Chaleco Bordado Cartujano”, que abraza toda la parte superior del cuerpo de la mujer, convirtiéndola al instante en una portadora orgullosa del estilo y la tradición de nuestra tierra.
¡En fin! Sabemos que cualquiera de nuestras prendas puede ser un atuendo a la medida de tus exigencias. Por eso no podemos dejar de recalcar la experiencia que solo Tomar Artesanía te puede brindar, acércate a nuestra tienda física o simplemente disfruta de nuestra página web y su extenso catálogo, estaremos complacidos de poder ser parte de tus eventos ecuestres más importantes…
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